Durante el embarazo son muchas las mujeres que se preguntan si seguir haciendo yoga es seguro, gestar una vida es un cambio importante y surgen muchas dudas.

Pues sí, es beneficioso y muy recomendable, incluso si no has practicado nunca, aunque lo ideal sería comenzar a partir de las doce semanas.

Hay que tener algunos aspectos en cuenta:

Evitar los tipos de yoga que requieran mucho esfuerzo.

Yoga a altas temperaturas.

Algunas asanas.

Restricciones con los pranayamas, y por supuesto consultarlo previamente con tu ginecólogo.

Modera el ritmo, si sientes alguna molestia durante la práctica o ves que tu respiración es agitada, no dudes en consultarlo con tu instructor inmediatamente.

Evita tumbarte boca abajo, hacer flexiones profundas hacia delante o hacia atrás, torsiones, y sobre todo exígete una práctica realista.

Pero teniendo en cuenta estas contraindicaciones, hay un montón de beneficios que pueden ayudarte muchísimo en el embarazo y el parto.

 

Trabajarás la respiración, practicándola de manera consciente durante la práctica de yoga, aprenderás a interiorizándola para controlar mucho mejor las temidas contracciones y el parto, así como mantener la mente en un estado de atención consciente para evitar pensamientos intrusivos que surgen en este tipo de situaciones.

Ayudaremos también a mejorar el sueño, ejercitar fuerza y flexibilidad en diferentes músculos que tienen que estar presentes en el parto, y a reducir la ansiedad.

El yoga prenatal es una técnica muy recomendable para el parto y posparto, ya que, además de prepararte de forma física, psicológica, y emocional, no cuesta ningún esfuerzo ni es agotador.

El yoga en el embarazo puede ayudar de una forma muy especial a las madres a conectar con su cuerpo y desarrollar una consciencia plena y control de todo el proceso.

En Hiru yoga Irún tenemos la opción de prepararte para esta increíble etapa de tu vida.

¡Ven a probar sin compromiso, te esperamos!

Namaste😉